jueves, 2 de enero de 2014

Manual para no perder el tiempo

El tiempo y sus concepciones científicas y filosóficas. Si hay algo que me aterroriza es sentir que pierdo el tiempo, eso tiene un sentido subjetivo. ¿Qués es perder el tiempo? ¿Cuándo lo pierdo?

En una oportunidad sentí que todas las mañanas de mi vida se iban por un agujero negro. Veía pasar las horas caminar de puntillas frente a mí y no podía retenerlas. Pensaba todos los días que la solución era planificar mi día a día, emprender proyectos, realizar lecturas, estudiar, escribir...pero nada. Realizaba tareas inútiles, que nada tenían que ver con mis gustos e intereses. Cada día me sentía más anulada.

Al llegar las vacaciones, viajé por tres días a una ciudad cercana sólo a comprar libros; al regresar a mi casa, preparaba y tomaba té, me dedicaba al jardín, a la lectura y a escribir artículos; salía a pasear con mi hija...Sentí haber aprovechado el tiempo al máximo, de haberlo gozado a plenitud. Ésta era mi manera de vivir mi tiempo con felicidad. Me imagino que para otros sería lo contrario, perder el tiempo.

Entonces ¿cómo se forma la percepción de perder o de aprovechar el tiempo? ¿Se encuentra condicionado por sistemas o mecanismos de recompensas y reconocimientos? ¿el esfuerzo y el trabajo como valor? ¿lo que nos gusta o nos hace feliz?

Una parte del tiempo es mía; otra, me la compran o la vendo por horas-trabajo. El tiempo que es mío, tengo el derecho de vivirlo como me da la gana, luego suspiro mejor.




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